Al mirar mi cara en el espejo he sentido un poco viejo el corazón. Mis pasos rumbeé para el recuerdo muerta la esperanza la ilusión. Gambeteando cuadras fui a la esquina recordé mi chiquilina nuestro amor. Fue mi pretensión, tan solo verte y en mis ojos retenerte primer amor. Creí que la vida de mí se burlaba cuando alegremente te vi aparecer. Quise ir a tu encuentro traté de llamarte y herido gritarte no me conoces... Un ángel muy rubio corrió hasta tus brazos se hundió en tu regazo te llamó mamá. Y al verte dichosa feliz me he sentido y al barrio querido no he vuelto jamás. Todo estaba igual, nada cambiado el balcón tan perfumado donde soñé. Descuidé tus besos, tu ternura tras la aventura me alejé. Supe a la distancia tu valía y al volver ya no eras mía sólo quedé. Se alejaba el sol como tu vida. y en la tarde ensombrecida me marché.