Recuerdo que hace tiempo, creo que antes de nacer, cuando las horas perdidas llegaban al amanecer. No había que cumplir promesas, el cansancio era de placer, las lágrimas eran de risas, y parece que aún fue ayer. En los amigos creía, y en palabras de mujer, en Dios, patrias y banderas, y en el diablo también. En leyes, familias, escuela y, claro, también en el Rey. Voy recordando mentiras y parece que aún fue ayer. Cuántas ilusiones traje a este mundo al revés, que perdiendo una al día creo que me quedan aún dos o tres. Sin fe, qué triste un final sin fe, cansado ya de perder pensando lo que la vida pudo haber sido y no fue. La noche ya se gastó, el sueño empieza a caer, los recuerdos son cenizas y parece que aún fue ayer. El día del viento llegó, la esperanza ya se fue, o nacemos fracasados o se fracasa después. La vida ya se gastó, el tiempo empieza a caer, los días están contados y parece que aún fue ayer. Cuántas ilusiones traje a este mundo al revés, que perdiendo una al día creo que me quedan aún dos o tres. Sin fe, qué triste un final sin fe, ya nada se ve como es, pena le doy a la pena pues penas coleccioné. Ahora el reloj se paró, harto ya de correr cómo se fueron los años y parece que aún fue ayer.