Recuerdo tu champú, puntas abiertas, cabello graso, y ahora ya no me haces ni caso. Triste carnaval, este año no uso careta, en la puerta tienes las maletas. Y la gente inteligente espera pacientemente en la clínica mental. Y me siento como un demente cuando pienso en aquel tente que no pude terminar. Lo tuyo es engañar, los japoneses no son tan chinos, en Falcon Crest no sólo bebían vinos. Eterna juventud, debo olvidar el montar en bici, prefiero olvidarte que no es tan difícil. Y la gente inteligente espera pacientemente en la clínica mental. Y cuando murió Chanquete toda esa gente inteligente no lo pudo soportar.