Será que el último verano se escapó en otro metro, que en este vagón no sale el sol, que ayer no llamaste por teléfono. Será que es temprano y no quiero ir al trabajo, será que tu olor nunca llega hasta aquí abajo, serán tus retrasos. Será que este contrato temporal no entiende de tardes de cine ni de amaneceres. Será que hace frio y me duelen las rodillas y los alquileres, será que aún no vives conmigo, los gritos de padre como alfileres. Será la ETT, que cierra mis puños, que deja mis sienes repletas de nubes, neveras vacías, horarios de trenes. Será que el reloj me duele. Será por eso que esta alma cansada te echa de menos. Llega mi parada.