Sabrosa tierra caliente, cómo se sufre pa' trabajá. ¡Ay, ay, mi hamaca que se menea, tan perezosa bajo el palmar! Sabrosa tierra caliente, llena de gente que está cansá. tierra de los negritos, fatigaditos de no hacer na'. Qué valiente es Vicente, qué valiente de verdad. Yo no sé de dónde saca esa gran vitalidad. Porque cada dos semanas, quince días a ser cabal, se descuelga de la hamaca y su sueldo va a cobrar. ¡Pero así se va a matar!