Entraste en su cuarto tu madre dormía, mueca de muerte tus ojos negros como el sol las paredes recargadas de desgracia, el crucifijo Viste tu futuro sin amargarte usaste tus venas para escapar. Desfiguraste tus días de escuela desfiguraste tus días de escuela desfiguraste tus días de escuela desfiguraste tus días de escuela Recordaste el presente quisiste ocultarte dentro tuyo pero la sangre coagulada que ingeriste te perturbó más ojos negros.