Me muero de ganas de decirte te quiero y sé que es imposible; no puedo, no debo Maldigo el paraíso que cuando se presenta no dura lo que una estrella fugaz. Al fin lo tuve entre mis brazos, aquí esta y se va... Y sé que no podré volver a verte jamás. Lavaste mi pie contra tu pecho de luna Con puntas de tu mojado pelo de espuma. Revivo aquel milagro de la marea blanca que era tu cuerpo derramando luz. Aun palpita en el recuerdo, eras tú, eres tú... Y sé que no podré volver a verte jamás. No hacías preguntas, no querías respuestas, tu cuerpo y el mío dialogaban a tientas Buscando el ritmo exacto que marcan los latidos cuando conversan con la misma voz. Al fin tocaba la belleza, era amor, es amor... Y sé que no podré volver a verte jamás.