Habrá que someter a referéndum Las cartas de los bancos, la tristeza Que flota entre los restos del naufragio Las flores de papel y las certezas Que arañan la pizarra del pasado Pero este mes viene desmadejado Y todo trae el sabor de un mal tequila Agriado por la sal que traen los llantos De las salas de embarque hacia la vida Y el mundo estalla en todos los abrazos Tiempos difíciles, mi amor Quieren robar la primavera Arde el cielo y mi corazón Acusa ahora esta ronquera De tanto gritar sin encontrarte Y alumbra la noche luz de notarios Que escriben un mañana sin razones Sin árboles, sin libros, sin canciones Que nos rescaten de todos los fracasos Habrá que someter a referéndum La voz de los cajeros, la tristeza La tiranía del tiempo y los espejos Los cuentos de dragones y princesas La resaca, los quince de febrero Estallan las alarmas financieras Suben las almas y el coste de la vida También al alza están los crisantemos De tanto desamor que no cotiza Y yo te busco en todos los inviernos Tiempos difíciles, mi amor Quieren robar la primavera Arde el cielo y este corazón Acusa ahora esta ronquera De tanto gritar mientras contemplo Viejas constelaciones desgastadas Por el zarpazo inútil de deseos Que fueron persiguiendo a otras estrellas Fugaces que salieron a tu encuentro