Mercedes la que a mi alma consuela sin cesar que siempre me ha querido con perdida pasión que sólo por mí vive que siempre me querrá con todo lo que siente su amante corazón. Por ella canto y lloro, por ella siento amor por ti Merced querida se extingue mi dolor. No me desprecies nunca, pedazo de mi vida, para vivir tranquilos queriéndonos los dos.