De la distancia se cuelga Y se vuelve a caer Una paloma le llama Y le anuncia el ayer, y le anuncia el ayer. De la montaña es el viento El sendero la hiel, Y el aguacero es el verbo Que le da de beber, que le da de beber. Pero se trepa en mis ojos, Y se acomoda en mi piel Como a una fresca alborada Solitaria y de pie. Lágrimas de colpa y viento Lleva su amanecer, Rutas de adobe y silencio Desandando sus pies, desandando sus pies. Hundo mi huella en su arena Malherida de sed Cartas de amor que llegaban De un antiguo querer, de un antiguo querer. Pero se trepa en mis ojos Y se acomoda en mi piel Como a una fresca alborada Solitaria y de pie, solitaria y de pie.