Cuando llegaste tú el cielo se asustó, de tanta claridad amaneció la vida de mi mano. Cuando llegaste tú todo se estremeció que estallido de paz, que sereno candor me esperaba. Confieso que temo a la muerte desde que el mundo eres tú, un cisne se posa en mi vientre, todo se acaba sin tu luz. Y hasta mi sombra leve teme que sea tan breve como esta canción.