Solo en las rutas de mi destino, Sin el amparo de tu mirar, Soy como un ave que en el camino Rompió las cuerdas de su cantar. Cuando no estás, la flor no perfuma; Si tú te vas, me envuelve la bruma. El zorzal, la fuente y las estrellas Pierden para mí su seducción. Cuando no estás, muere mi esperanza; Si tú te vas, se va mi ilusión. ¡Oye mi lamento, que confío al viento Todo el dolor cuando tú no estás! Nace la aurora resplandeciente, Clara mañana, bello rosal; Brilla la estrella, canta la fuente, Ríe la vida porque tú estás.