Aunque te quiera bien, quiero más, necesito algo más. Te dolerá entender, te pesará saber que, al final, dos risas hoy comparte mi alegría. No alcanza un corazón, un solo corazón para empujarme la vida. No trates de aceptar la verdad porque escapa la razón. Lo siento, pero yo respondo a la pasión. Soy real, no busco ni pretendo tu perdón. Es como es, al otro lado del mundo alguien me espera. Si me quedo a tu lado, no lo llames pecado. Elegir entre el aire y el fuego sería morir de amor. El dolor de una herida nunca es sangre perdida. Hoy mis ojos no mienten, tu abrazo presiente que yo soy feliz a escondidas. Tan diferentes son tú y él, la espada y la pared. Hay un puente entre los dos, un camino sin adiós que recorre temblando en cada viaje de mi piel. Es como es, un equipaje tan liviano como el alma. Si me quedo a tu lado, no lo llames pecado. Elegir entre el aire y el fuego sería morir de amor. El dolor de una herida, nunca es sangre perdida. Hoy mis ojos no mienten, tu abrazo presiente que yo soy feliz a escondidas. Si me quedo a tu lado, no lo llames pecado. Elegir entre el aire y el fuego sería morir de amor. El dolor de una herida, nunca es sangre perdida. Hoy mis ojos no mienten, tu abrazo presiente que yo soy feliz a escondidas, soy feliz a escondidas, feliz a escondidas.