Al estilo lo llevaron detenido, la elegancia ahora viaja en ambulancia parece que el buen gusto estuviera prohibido voy a encender una vela por si aun queda una esperanza. Si las teclas en el piano se volvieron todas blancas y la música barata ya no para de sonar si la clave de sol hoy amaneció nublada voy a volver a la cama y dormir hasta mañana. El poeta está aburrido y le sobran los motivos la canción cumple condena por ser demasiado buena yo lo siento, Frank, lo siento de verdad pero esto es simplemente lo que hay. El pescado baila al ritmo sincopado del mercado y la oferta y la demanda lo tienen muy preocupado en cambio el bandoneón que es un gran sentimental lo encontraron moribundo en la puerta de un hostal. La guitarra confesaba que ya nadie la tocaba por eso mató al cantante con una cuerda oxidada si se quieren ir nadie te va a perseguir pero por favor cierren la puerta al salir.