Si algún día ya no estás coladita por mis huesos no hará falta que me jures que lo nuestro ha terminado. Me gustan las cosas claras y el chocolate espeso te diré adiós muy buenas y esta historia se ha acabado. Cuando dejes de quererme saldré tan disparado que será imposible verme como alma que lleva el diablo, como un cometa desbocado como un objeto volador no identificado. Quién conoce la medida ideal para el orgullo, reconozco que mi caso es un tanto exagerado ya que antes que arriesgar a pringar como un capullo le pondré a mi corazón el cartel de clausurado. Cuando dejes de quererme saldré tan disparado que será imposible verme como alma que lleva el diablo, como un cometa desbocado como un objeto volador no identificado. Que tu juegues con mi cuerpo hasta quedar extenuada es natural como el aire cuando silba entre las piedras. Con mi alma no se juega ya que está muy castigada tengo un alma veterana que ha perdido muchas guerras. No hace falta mantener a la llama del amor encendida con recursos, con fuegos artificiales si no brilla por su ausencia si no quema su calor vale mas abandonar y evitar mayores males. Cuando dejes de quererme...