¡Toma el llavero abuelita y enseñame tu ropero! Con cosas maravillosas y tan hermosas que guardas tú. ¡Toma el llavero abuelita y enseñame tu ropero! Prometo estarme quieto, y no tocar lo que saques tú. ¡Ay qué bonita espada de mi abuelito el Coronel! deja que me la ponga y entonces dime si así era él. Dame la muñequita de grandes ojos color de mar, deja que le pregunte a que jugaba con mi mamá. ¡Toma el llavero abuelita y enseñame tu ropero! Con cosas maravillosas y tan hermosas que guardas tú. ¡Toma el llavero abuelita y enseñame tu ropero! Prometo estarme quieto, y no tocar lo que saques tú. Enseñame tu vestido que hace ruidito al caminar, y cuentame cuando ibas en carretela con tu papá. Dame aquel libro viejo de mil estampas, lo quiero abrir. A los niños en estos tiempos los mismos cuentos nos gusta oir.