Salió la gallina, salió a pasear con sus diez pollitos por el corral. Doña Cocorica les hace ver lo que todo pollo debe saber: Aprendan primero que aquí en el corral su padre el Gallo es la autoridad; a diario, temprano, se oye su voz, y es porque ordena que salga el Sol. Doña Cocorica se encariñó con los diez pollitos que Dios le dió, apenas salieron del cascarón y ya todos saben bien la lección Ahora pollitos tendrán que buscar algún gusanito para merendar. Y al verlos rascando tras una lombriz, la dulce Gallina es muy feliz. Doña Cocorica con sencillez se siente orgullosa de ser quien es. Mirando a los rubios bajo sus pies son bolas de estambre de tipo inglés. Escuchen pollitos, no deben correr pues son pequeñitos, se pueden caer. A los pollos tontos se los comerán los pícaros gatos o el gavilán. Los pícaros gatos o el gavilán...